En Las aventuras de Sherlock Holmes, una serie de pistas permiten a éste y a su inseparable compañero, el Dr. Watson, ir develando el misterio en torno a extraños casos que incluyen robos, asesinatos y desapariciones. Arquetipo del detective por excelencia, Holmes es un genio a la hora de leer los indicios que conducirán a la captura del culpable. Saliéndonos de la ficción, algo similar ocurre con la tecnología. Para localizar un libro en el espacio virtual, nuestros equipos electrónicos (Holmes y Watson) realizan un sinfín de operaciones para resolver el “misterio”, es decir, para encontrar la publicación que estamos buscando, así como también otras que no precisamente deseábamos ubicar, pero que se relacionan con la anterior.

A este mecanismo que nos permite localizar libros y, prácticamente, todo en internet se le conoce como algoritmo (término tan antiguo como las matemáticas) y, hoy día, ha cobrado importancia debido a que los sistemas computacionales lo han perfeccionado a tal punto que son capaces de realizar miles de millones de operaciones en cuestión de segundos (Fanjul, 2018). De esta manera, los algoritmos son los responsables de localizar una película, una canción, un video, un libro, etc., con base en nuestras búsquedas anteriores o mediante la relación que tiene un contenido con otros similares. No obstante, su funcionamiento sería imposible sin la presencia de una serie de informaciones que son como el “pasaporte” que permite viajar en la red hacia esos contenidos, me refiero a los metadatos.

“Unos buenos metadatos son la diferencia entre localizar o no un libro y relacionarlo con contenidos similares, de modo que, incluso quien no lo busque, tenga acceso a él y pueda decidir si leerlo o no”.

Pero, ¿qué son los metadatos? Definidos de manera sencilla, son las informaciones básicas que permiten reconocer y localizar un libro. En Bookmate, consideramos datos básicos de toda publicación los siguientes: autor, título, ISBN, idioma, año de publicación, editorial, sinopsis del libro y países en que se permite su venta y en los que no. Además, contemplamos otros como traductor, ilustrador, género y categorías BISAC, Thema u ONIX.

Esta sencilla lista de datos sobre un libro permiten ubicarlo dentro del océano de información de que se alimenta la red día a día y minuto a minuto. Por eso, sin metadatos suficientes y específicos es casi imposible encontrar un libro. En segundo lugar, unos metadatos bien definidos relacionan un título con otros del mismo autor, género, editorial, tema, etc., de modo que pueda ser localizado incluso por aquéllos que no están buscándolo, tal como ocurre con el hashtag (#) y los contenidos recomendados por cualquier plataforma de streaming.

A la izquierda, e-book con pocos metadatos que, por ello, no se relaciona con otras publicaciones; a la derecha, el mismo libro, pero con metadatos correctos y suficientes vinculado a otros títulos del mismo autor. Fuente: creación propia.

Como puede verse, los metadatos son las vías que comunican las millones de informaciones que hay en la red. Así, unos buenos metadatos son la diferencia entre localizar o no un libro y relacionarlo con contenidos similares, de modo que, incluso quien no lo busque, tenga acceso a él y pueda decidir si leerlo o no. Esto último es tarea de los diferentes algoritmos; como en la novela de Conan Doyle, nuestra labor como autores y editoriales es proveer de buenas pistas o datos a los algoritmos (Holmes y Watson) para que el lector pueda localizar el libro que busca o podría interesarle.

A fin de cuentas, la lectura es un encuentro con lo desconocido, con lo que no buscábamos pero necesitábamos encontrar, ahora (gracias a los metadatos y los algoritmos) al alcance de un clic.

Referencias

Fanjul, Sergio C. (2018, 24 de marzo). En realidad, ¿qué […] es exactamente un algoritmo?, en El País. Recuperado de https://retina.elpais.com/retina/2018/03/22/tendencias/1521745909_941081.html (consultado el 1 de marzo de 2021).

Saucedo, Ana Sofía, y Fernando Alcaraz. (2021, 11 de febrero). Seminario editoriales: metadatos, en Estrategia Nacional de Lectura. Recuperado de https://www.facebook.com/EstrategiaNacionalDeLectura/videos/428200371630110 (consultado el 1 de marzo de 2021).