Crear las condiciones para que una empresa adquiera una ventaja competitiva es una de las responsabilidades más apremiantes de la alta dirección. Su obligación es aprovechar de la mejor manera los recursos y capitales de los que disponga. Dos muy importantes lo constituyen: por un lado, la creatividad y, por otro, el conocimiento de todos los colaboradores. La ecuación que describe el comportamiento de la organización debe incluir, entre otras, estas dos variables, las cuales, relacionadas apropiadamente, pueden dar como resultado la innovación, que es, sin duda, una de las herramientas que mayor efecto puede tener en el desempeño de las empresas.